viernes, 12 de junio de 2015

LAS EMOCIONES Y EL INTESTINO

Podemos ser conscientes o no de ello, pero cuando mentalmente estamos mal se somatiza en el cuerpo. Es muy corriente escuchar "tengo el estómago revuelto por los nervios", incluso existen anuncios de barritas de fibra en la que se muestra a una persona malhumorada a la que después de tomar la barrita (suponemos que para ir al baño) cambia de actitud, ya que se suele asociar el mal humor a una persona estreñida.

Intentaremos de forma muy resumida enumerar algunas de las emociones que afectan al intestino;

El intestino es el centro de absorción e integración del alimento y de los alimentos como el de los pensamientos, los sentimientos y de mi realidad actual.
 Todo lo que me causa tristeza, temor, confusión, rebelión, vergüenza o cualquier otro pensamiento o sentimiento discordantes puede encontrar una liberación y crear problemas intestinales. La digestión se hace a este nivel, por lo tanto si tengo contrariedades y que me siento víctima de un “golpe bajo”, de una “mala jugada”, o que tengo la sensación que alguien me ha hecho “una mala pasada”, ¡tendré malestar en los intestinos porque no digeriré sencillamente! Estaré particularmente afectado si se trata de un miembro de mi familia que es el “cerdo”. Al poder digerir esta situación, se manifestará por un problema al nivel de mis intestinos.

Si se trata del intestino delgado:

La función del intestino delgado es la de absorber y asimilar.El intestino delgado absorbe todo lo bueno y el resto llegará al intestino grueso evacuar los deshechos.
Puede tener tendencia a juzgar las situaciones que se presentan a mí teniendo opiniones muy marcadas con relación a mis nociones de “bien” y “mal”. También tendrá tendencia a tener la sensación de carecer de muchas cosas en mi vida.
Es una persona que se aferra mucho a los detalles en lugar de ver la situación globalmente. Aun cuando sólo una parte de lo que sucede no le convenga, su tendencia será de rechazarlo todo. Por una insignificancia teme carecer de lo necesario.

En cambio si es el intestino grueso:

Aquí sólo hay deshechos.Está vinculados con la habilidad a dejarse ir, a sentirse suficientemente en seguridad interiormente para ser espontáneo.Simbolizan el hecho de dejar circular los acontecimientos en la vida. Se puede tener una necesidad muy fuerte de retener y controlar lo que sucede.Se agarra a ciertas cosas, a personas o situaciones, incluso hasta vivir celos y posesividad y los intestinos están congestionados por todo lo que retienen y que ya no es útil, pudiendo causar, entre otras cosas, el estreñimiento. Aprender a ser autónomo y a decir que tienen todos los recursos necesarios en el interior  para crear lo que quiero. ¡La única persona sobre quien puedo tener control, soy yo - mismo.!